Siempre que hablamos de maternidad o de niños, solemos hacer referencia a las mamás y rara vez explicitamos o tomamos en cuenta a los papás. Por este motivo, he decidido dedicar el post de hoy exclusivamente a los padres (en masculino).

Muchos padres no son conscientes de lo que supone tener un hijo hasta la llegada del nacimiento del bebé, pero en realidad, la figura del padre puede hacer numerosas aportaciones desde la concepción del bebé y de esta manera sentirse más implicado en este proceso.

bebe-con-papaAdemás, al igual que las mamás han de sacar tiempo para cuidarse más y estar tranquilas, los padres también pueden seguir esta recomendación, empezando con cosas tan sencillas como salir antes de trabajar para ir con la madre a las visitas médicas (y no solo a momentos puntuales como la confirmación de que están embarazados o conocer el sexo del bebé), ya que de esta manera también puede preguntarle sus dudas al médico. En estos nueve meses, puede aprovechar para hablarle al bebé mientras está en la barriga de su madre, ya que éste puede oírle desde muy pronto, así cuando nazca, reconocerá su voz y se calmará antes cuando le oiga.

Es importante que durante el embarazo el padre y la madre busquen tiempo para estar juntos y a solas, así podrán platicar sobre lo que supone el tener un hijo para ambos, cómo se sienten al respecto y disfrutar de la intimidad entre ambos, ya que con la llegada del bebé quedará poco tiempo para estar solos como pareja.

Los padres también pueden revisar qué tipo de padres han tenido y qué tipo de padres quieren ser, es decir, investigar sobre el tema y decidir que rol les gustaría desempeñar y cómo pueden hacerlo. En este sentido, es de gran ayuda conversar con otros papás, leer libros o buscar por internet, entre otros.

Cuando el bebé nazca, la función más importante del papá va a ser sostener a la mamá y al bebé, en todos los sentidos. Es decir, el papá va a ser el encargado de preocuparse de los problemas cotidianos para que la mamá pueda llevar a cabo el maternaje lo más libre de preocupaciones posibles, reduciendo al máximo el estrés que puede afectar a ambos. De esta forma, puede graduar las visitas, cuidar del bebé, organizar las tareas domésticas y apoyarla emocionalmente en lo que necesite.

Después de todo ello, solo me queda decir ¡Enhorabuena Papás!