Ahora que estamos en pleno verano, muchos padres quieren que sus hijos e hijas aprovechen el tiempo, bien sea leyendo, estudiando o haciendo cuadernillos para que “no pierdan la costumbre”, yendo a campamentos bilingües, etc. El caso es no verlos tirados en el sofá viendo la tele o jugando a las máquinas.

Y a mí me gustaría preguntarles a esos papás ¿ustedes recuerdan cuando eran pequeñ@s? ¿qué cosas les gustaba hacer? ¿a qué les gustaba jugar? ¿qué hubiesen querido hacer los meses de verano si les hubiese dejado? Más fácil todavía, ¿qué os gustaría hacer si os dejaran dos meses de vacaciones?

Muchos de nosotr@s responderíamos ¡DESCANSAR! Tirarnos en el sofá con la máquina del aire acondicionado un par de días por lo menos y después aprovechar para viajar, ir a la piscina, a la playa o a cualquier otro sitio que se aleje del estrés de la ciudad. Otr@s, en cambio, elegirían quedarse en su casa ricamente y disfrutar de ella todo lo que no pueden a lo largo del año.

Pues bien, los niños y niñas no se diferencian mucho de nosotr@s en ese sentido. Ell@s también están cansados del estrés que les supone haber estado todo el año horas y horas sentad@s en una silla escuchando al profe en el cole, estudiando, con las actividades extraescolares, clases de refuerzo y exámenes . Con lo cual, si les preguntamos qué quieren hacer en verano, muchos de ellos y ellas nos dirán que jugar, jugar en casa con sus juguetes, jugar con sus máquinas, jugar en la piscina con los amig@s, salir al campo y sí, también tirarse en el sofá a ver la tele. ¿Por qué no los dejamos? ¿Por qué esa insistencia de los adultos en que “aprovechen” el tiempo en actividades académicas? Los niñ@s necesitan jugar y moverse porque esa es su manera de aprender, esa es la vía por la que adquieren los conocimientos necesarios para después poder desenvolverse en la vida diaria.

Much@s de vosotr@s me diríais ahora que si dejaseis a vuestro hijo jugar todo lo que quisiera a las máquinas estaría todo el día, yo tengo mis dudas, creo que si un niño o niña juegan con aparatos electrónicos todo el día durante varios días seguidos es que hay una necesidad de fondo que no se esta resolviendo. Pero bueno, tenemos otra opción, podemos limitar el uso de las máquinas al tiempo que como padres consideremos oportuno. En cuanto a la lectura y los idiomas, que son las otras grandes preocupaciones, hagámoslo juntos. Veamos juntos con ell@s dibujos en inglés o escuchemos música con ell@s en inglés y si queremos que lean, vamos juntos a una librería y que ell@s mism@s escojan qué quieren leer, sin importar si el libro es gordo o flaco, con muchas o pocas letras.

Lo que propongo es que aprovechemos este tiempo para dejarles ELEGIR y que así poco a poco vayan siendo cada vez más autónom@s y responsables. Porque sí, la responsabilidad también se aprende en el tiempo de ocio.

¡Buen verano a tod@s!